Hay muchas razones por las que tu vida íntima podría detenerse: las rupturas, las largas horas en la oficina, los viajes frecuentes o incluso ciertos medicamentos pueden afectar tu capacidad (y deseo) para continuar.
Pero al igual que apartar tiempo para hacer ejercicio o comer vegetales con cada comida, es posible que no te des cuenta de cuán importante es el delicioso para tu salud en general, hasta que simplemente dejas de hacerlo.
Desde tu estado de ánimo hasta tu relación y el riesgo de sufrir alguna enfermedad, aquí te presentamos 10 formas en las que no tener relaciones puede alterar por completo tu cuerpo y mente:
1. Estarás más estresada
Hacer travesuras en tu habitación ayuda a desahogarte. Las personas que se abstienen de tener relaciones luchan para hacer frente a situaciones estresantes como hablar en público, en comparación con aquellas que disfrutan de la pasión al menos una vez a la semana.
¿El sentido de esto?
Durante los encuentros íntimos, tu cerebro libera sustancias químicas que te hacen sentir bien, como endorfinas y oxitocina, que te ayudan a vivir más a gusto. La buena noticia es que no necesitas una pareja para obtener los beneficios relajantes, ya que, tocándote a ti misma tienes los mismos efectos.

2. Podrías volverte más susceptible a los resfriados
Es cierto que hacer menos el delicioso puede reducir tu exposición a los gérmenes, pero desafortunadamente, también te saltarás los beneficios de estimular tu sistema inmunológico.
Las personas que ponen en práctica el amor y la pasión una o dos veces por semana disfrutan de un aumento del 30 por ciento en la inmunoglobulina A. Esta es una proteína que combate las infecciones. Y una de las primeras líneas de defensa del cuerpo contra los virus.
3. Las infecciones urinarias podrían volverse menos comunes
Si alguna vez has experimentado una infección del tracto urinario, sabes lo incómodo que puede llegar a ser.
Las relaciones íntimas son un factor de riesgo importante para estos problemas, ya que, puede empujar las bacterias hacia la uretra, el conducto que libera la orina de tu cuerpo. Luego estas viajan a la vejiga, causando la infección.
4. Tu riesgo de ETS disminuye
Lamentablemente, las tasas de enfermedades de transmisión sexual han ido en aumento en los últimos años. Obviamente, la mejor manera de evitarlas es no tener relaciones íntimas en absoluto. Pero hacerte la prueba, practicarlo seguro y hablar con tu pareja sobre la protección necesaria, te ayudará a evitar más de un problema.
5. Podrían surgir inseguridades sobre tu relación
No tener relaciones podría afectar tu felicidad, cercanía y seguridad en la relación. Si estás casada, llega a ser contraproducente para tu autoestima, genera culpa y disminuye los niveles de oxitocina, así como de otras hormonas.
Sin embargo, esto no significa que una relación sin pasión no pueda ser feliz. Besar, tomar de la mano y hacer cumplidos puede conectarte a un nivel emocional más fuerte con tu pareja.

6. Es posible que te resulte más difícil excitarte
Una de las formas más efectivas de aumentar la libido es intentar hacer más el delicioso, incluso si tienes que apuntarlo con un lápiz. Experimentar más intimidad física y emocional puede ayudarte a sentirte más conectada con tu pareja.
7. Las paredes de tu zona íntima podrían adelgazarse
Una vez que llegues a la menopausia, tu cuerpo no bombeará tanto estrógeno. Esto puede provocar atrofia vaginal. Una afección en la que tus paredes íntimas se vuelven delgadas, secas y más propensas a desgarrarse.
8. Experimentarás dolores y molestias
El delicioso puede ser un remedio eficaz para ciertos dolores, como los cólicos menstruales, los músculos adoloridos o incluso, el malestar en tu cabeza.
9. Es posible que tu suelo pélvico no se mantenga en forma
Todos los seres humanos tenemos suelo pélvico, y no tener relaciones íntimas puede comprometer su fortaleza. Esto, a su vez, afecta tu capacidad para llegar al clímax y la intensidad de los mismos. Incluso, podría llegar a pasar que, si tratas de tener uno, te sentirás más débil y sin ganas de repetir.
10. Aumentarás el riesgo de tener sueños de menor calidad
Cuando experimentas un intenso placer, tu cuerpo libera un cóctel de hormonas que te ayudan a conciliar el sueño. Estas son la vasopresina y la oxitocina, las cuales reducen tu estrés y te ayudan a conciliar el sueño rápidamente.