Probar algo nuevo entre las sábanas es como cuando un influencer promociona un nuevo producto. Si bien está emocionado y esperanzado, no está seguro de cómo resultará.
Y aunque entrar al territorio del delicioso por detrás puede parecer intimidante, saber cómo prepararte para ello es más fácil de lo que piensas. Si ya sabes todo sobre los clímax, te sorprenderá saber que atrás tienes miles de terminaciones nerviosas muy sensibles, tanto dentro como alrededor y también puede darte placer.
¿Listo para hacerlo por primera vez? Aquí está todo lo que necesita saber para ese momento:
1. Prueba solo primero.
Esta es una buena manera de ver cómo podrías empezar y si te gustan las sensaciones que te provoca. Utiliza para ello un juguete y un poco de lubricante, eligiendo el ritmo que más te convenga. La autosatisfacción trasera es posible en un ambiente tranquilo, creando tus propias sensaciones y atento a la reacción de tu cuerpo.
Así sabrás qué te funciona y qué no. Recuerda compartir esta información con tu pareja y así evitar malentendidos o problemas.
2. Habla, habla y habla.
Debes confiar completamente en tu amante antes de seguir este camino. Se necesita paciencia, cuidado y delicadeza para crear una experiencia placentera, o al menos que tu primera vez no sea tan terrible. De allí la importancia de hacerlo con alguien que te trate con cariño.
3. Utiliza siempre una buena lubricación.
No nos cansaremos de enfatizar este punto. Para evitar cualquier molestia, tendrás que usar mucho lubricante a base de agua, incluso más de lo que creas necesario. A diferencia de tu zona delantera, “tu chiquito” no se autolubrica, por lo que debes proporcionarle humedad extra.
El lubricante no solo te alejará de los posibles maltratos, sino que también aumenta tu placer y satisfacción.
4. Usa protección.
El delicioso anal es uno de los tipos de encuentros amorosos más riesgosos porque, esta no es una parte del cuerpo que se autolubrique. Esto significa que es susceptible a desgarrarse durante tus relaciones, provocando incluso algo de sangrado.
Cada vez que intercambias fluidos corporales, te expones al riesgo de contraer VIH y otras infecciones. Para ello, siempre usa protección, ya sea que lo hagas con tu pareja o si estás usando algún juguete travieso.
5. Relájate.
Si lo haces despacio y con mucho lubricante, no debería de dolerte. Acostúmbrate a la sensación pidiéndole a tu pareja que introduzca un dedo primero, o que use algún pequeño juguete.
Alerta de spoiler: obviamente sentirás que hay algo extraño dentro de ti. Sin embargo, a medida que te relajas y te acostumbras a la sensación, podrás comenzar a experimentar un tipo completamente nuevo de placer, que agregará un nuevo elemento a tu vida íntima.
6. No contamines tu cuerpo.
La forma más fácil de contraer una infección es propagar gérmenes desde tu zona trasera a la delantera. Asegúrate de que cualquier juguete o parte del cuerpo que te insertes detrás, esté limpia antes de introducirlo en tu área genital.
Lávate bien con agua limpia (y un jabón suave si es necesario) antes y después del delicioso, sin mezclar lugares.
7. Detente si te duele.
Por último, debes saber que estas son sensaciones nuevas e inusuales para tu cuerpo. Y, por lo tanto, debes escucharlo con atención. Un poco de dolor, especialmente al principio, es posible. Pero si comienzas a sentirte mal y te es difícil de soportar, deténganse de inmediato.
Generalmente, el dolor suele ser causado por fisuras o pequeños desgarros en los tejidos blandos alrededor de tu chiquito. Esto lo puedes evitar utilizando una gran cantidad de lubricante y elementos pequeños para irte acostumbrando poco a poco.
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